San Benito de Palermo, “El santo negro”, fue hijo de negros esclavos manumisos. Nació hacia 1525 en el pueblo siciliano de San Fratello, y murió a finales del siglo XVI (1589) en la ciudad de Palermo.
La festividad del Moro, como también es conocido, se celebra desde el Zulia hasta Trujillo y es incluido en gaitas y festividades navideñas por celebrarse su aniversario en diciembre.
Habitualmente, los tambores suenan para celebrar a Benito de Palermo acompañado con una procesión repleta de feligreses que acompañan a su santo. Todo indica que el origen del culto a San Benito en Venezuela se ubica en los alrededores de la población de Bobures, y desde allí se propagó por toda la Cuenca del Lago de Maracaibo y los Andes.
La danza ritual conocida como Giros de San Benito, ejecutadas en los andes venezolanos, consiste en bailar alrededor de un palo de cintas, tejiéndolo y destejiéndolo con movimientos graciosos y preciosos. Los giros se hacen ante la imagen en una ceremonia de saludo llamada Danza de Frente, y luego continúan ejecutando otras figuras.