El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva podría quedar en libertad en cuestión de días debido a una decisión emanada por el Tribunal Supremo de Justicia de Brasil (TSJ)
Algunos jueces del TSJ han hecho saber su intención de revocar la decisión que permitió encarcelar a acusados una vez que sus condenas fueron confirmadas tras una primera apelación, ésta es la razón por la cual Lula junto a otras personalidades políticas de Brasil se encuentran tras las rejas.
El juez del Tribunal Superior Marco Aurelio Mello decidirá esta semana si eleva al pleno del TSJ una moción contra el fallo de 2016, ya que para muchos, la decisión niega a los acusados el derecho constitucional de agotar todas las instancias del proceso de apelaciones antes de ser detenidos..
El juez Sergio Moro, quien es referente de la lucha anticorrupción en Brasil, indicó que la decisión del tribunal superior de hace dos años “expresaba la idea de que la impunidad y la corrupción van de la mano”.
Antes del dictamen del 2016, los criminales con dinero suficiente para pagar abogados podían presentar múltiples apelaciones y mantenerse en libertad hasta que sus casos agotaban el extenso y complejo sistema legal brasileño.
