La primera dama (E), Fabiana Rosales, rechazó el entierro controlado por funcionarios del régimen de Nicolás Maduro, calificandolo como un hecho como ilegal. “Vimos con repudio, como de forma ilegal, como acostumbra a actuar la usurpación, la inhumación de forma controlada de los restos del Capitán de Fragata, Rafael Acosta Arévalo”, dijo.
Rosales catalogó la retención de los restos mortales del Capitán Acosta Arévalo, como un secuestro por parte de la usurpación al tiempo que señaló que las pruebas ratifican al régimen como responsables del asesinato por torturas. “El acta de defunción revela que falleció por politraumatismos por objetos contundentes, desde la usurpación acabaron con su vida y es por ello que la familia militar debe reaccionar ante este vil hecho que enluta sus filas”, informó.